Love island

El otro día estábamos Mi Chico y yo viendo un programa de tv, en el que anunciaban el inicio de otro: “Love Island”.

El programa consiste, básicamente, en que meten en una isla a un puñado de solteros y solteras que cumplan los cánones de belleza (ellas pechotes y culazo, ellos tableta de chocolate y bien de tatuajes), y el que quede desemparejado, pierde y es expulsado. Van entrando solteros y solteras, hacen juegos y desafíos, y según la página del programa, hay enamoramientos, desenamoramientos, rupturas y conflictos varios. Y la audiencia, por lo visto, tiene mucho que decir (¿?).

Sé que no se ha estrenado, que antes de hablar de estas cosas hay que verlo, pero es que ya solo el envoltorio, me hace pensar: “pues nada, otro programa maravilloso que explica estupendamente a nuestros jóvenes y adolescentes en qué consisten las relaciones de pareja”.

Y es que hay un montón de programas que van dejando un mensaje así, machacón, continuo, sobre cómo es el prototipo de chico o chica ideal, y en qué consisten las relaciones, que en chavales que se están iniciando en los enamoramientos y las primeras parejas, hace que terminen por aceptar que una relación tiene que ser de una determinada manera, desembocando, como en estos programas, en unas relaciones tóxicas y poco reales.

Por ejemplo, Gran Hermano. Empezó metiendo un poco de todo, la persona alta, la baja, la gorda, la flaca, la intelectual, la viva la Virgen… Creo que porque no sabían muy bien cómo iba a funcionar esto, ni lo que iba a traer detrás. Pero después se convirtió en meter a un grupo de siliconadas (suelen ser mujeres) y croissants tatuados, con muy pocos principios y dispuestos a todo (incluida violación de una chavala borracha e inconsciente, por su supuesta pareja).

También se tenían que poner de acuerdo para gastar el presupuesto que tenían semanal para comida y otros vicios, como tabaco o alcohol (en las primeras ediciones, al menos; solo vi las 2 o 3 primeras). Eso era una caja de Pandora… salía lo mejorico de cada uno.

Y luego la frase de que “los sentimientos en la casa se magnifican”. A quienes hayamos ido de campamento 15 días, sabemos de qué se nos habla, pero es que nosotros éramos adolescentes hormonados, no personas de 25 a 40 años, con supuestos dos dedicos de frente y control hormonal y emocional… Vivíamos las cosas con la intensidad propia de la adolescencia y era una etapa normal, al crecer te das cuenta de cómo funciona el mundo en realidad. Pero en este programa se vende como real una pareja de adultos con las normas de los adolescentes, por lo que las referencias que se crean… lo dejo a la libre interpretación.

Luego la versión “vip”, ya da para un libro entero… famosos por cosas, así en general. Cosas como haberse liado con un torero; haber participado en OT (siguiendo su carrera musical sin pena ni gloria); haberse liado con una hija de la Faraona; ser tertuliano en el Sálvame; haber participado en otro reality; los Chunguitos… sí, sí, ¡los Chunguitos! también te digo que los expulsaron disciplinariamente a los 4 días por racistas y homófobos; exconcejalas, experiodistas, brujas (Aramis Fuster)… Vamos, que va la crème de la crème, y el ambientico es maravilloso… unas ganas de ir…

Enseñanzas:

  • La vida real son 16 personas metidas en una casa haciendo nada.
  • Cuando no estás de acuerdo con alguien, tiene razón el que más grita.
  • El que tu pareja formal, que conoces de hace 5 días, y solo de cosas que esa persona te ha contado (no tienes más referencias, ni de su entorno, ni de sus amigos ni de nada), te de una colleja con cara de mala leche es un símbolo de cariño normal en las parejas. Y que te insulte y te trate con desprecio también.
  • Hay que estar bueno o buena y delgado o delgada; si eres mujer, buenas tetas.
  • Sobre todo en las primeras ediciones, que aún se les podía ver fumar, es más importante gastarse el dinero en tabaco que en comer decentemente. Y el que no fuma es gilipollas.

Otro ejemplo, MyHyV, Mujeres y Hombres y Viceversa, o como se conoce en mi casa, Mujombres.

Bienvenidos al mercado de la carne. Hay unos tronistas, que van buscando el amor (el verdadero), y chicas, si el tronista es chico o chicos si la tronista es chica, que son los pretendientes, que intentan conquistar a su tronista; por supuesto, todo heteronormativo, como las personas de bien. Se suceden una serie de citas que son vistas por todos, en las que el tronista conoce más en profundidad a sus pretendientes, y finalmente el tronista elige, aunque también puede abandonar en soledad.

Por supuesto todos superestupendos, delgados, mazaos y ellas con buena delantera,

Y bueno, para aconsejarle sabiamente, tenemos la figura de los asesores del amor u opinionistas, de la talla de Pipi Estrada, Antonio David Flores, Bárbara Rey, Sofía Cristo o Lydia Lozano, conocidos por su estabilidad emocional y criterio en los temas del amor.

Enseñanzas:

  • Van a ir a tu puerta un puñado de pretendientes que beberán los vientos por ti, se pelearán entre ellos y discutirán a gritos, para tener razón.
  • Luego tú eliges, porque esto va así.
  • Si no, puedes ser pretendiente, y ponerte a disposición de que alguien te elija, y tenga la última palabra sobre vuestra relación, vamos, lo que esa persona quiera.
  • Tienes que ser heterosexual.
  • Tienes que estar muy buena o muy bueno para gustar a tu tronista, siguiendo los cánones de belleza que marque la sociedad del momento.

Otro más, Gandía Shore. Este viene precedido de su versión de EEUU, Jersey Shore.

Este, básicamente trataba de 8 jóvenes, ninis, con más músculo que cerebro, o más extensiones que cerebro, depende, a los que mandan a un casoplón en Gandía a pasar el verano.

Su rutina diaria consistía en: Levantarse a mediodía; “trabajar” algún día que les tocaba en algo tan duro como repartir flyers en el paseo o dejarse ver en un chiringuito (que ni siquiera poner copas, aunque alguna pusiesen); a casa, siesta, y empezar chapa y pintura, mientras calentaban con unos cubatas para darlo todo en la discoteca que tocaba; fiesta loca hasta las tantas, poniéndose como un atún; y si podían, y el cuerpo les seguía, un polvete para culminar el día, con alguien de la casa o algún incauto o incauta que convencían durante la noche. Vida dura, pero dura dura.

Los participantes son para dar de comer aparte; algunas de sus descripciones son: “¡soy la reina de las tarimas, chavales!”; “¡miau!¡miau!¡miau!”; ¡las feas pa’ los feos, las guapas pa’ mí!” (que había que ver al “Adonis”); “¡Aquí la peña está muy loca!”, y otros mensajes de la misma profundidad que supongo que, como a mi, debido a su profundidad se os escapan de análisis.

Enseñanzas:

  • La juventud consiste solo en beber, salir de fiesta y mazarse en el gimnasio.
  • No se te olvide que hay que follar todos los días, da igual con quién, tú folla.
  • Trabajar es ir a un chiringuto en la playa 2 horas, y es muy duro. Otros cosas que llaman trabajo, como limpiador, albañil o cajero de supermercado es porque la gente no sabe lo que es realmente el trabajo duro, y no sabe qué hacer con su vida, no es porque haya que sacarse las habichuelas de alguna manera.
  • Hay que estar bueno o buena para triunfar.
  • La resaca es una enfermedad laboral por la que te dan la baja.

Y para mí el programa más increíble de todos, La Isla de las Tentaciones. Consiste en 5 parejas (heteros, por supuesto), en crisis.

Bien, buena base.

Entonces, para arreglar sus cosas, deciden ir a un programa, en el que los separan, las mujeres van a un casoplón, y los hombres a otro. Allí, las mujeres convivirán con unos cuantos solteros gordos, cojos, miopes y medio calvos… y ellos con unas cuantas solteras gordas, cojas, miopes y con granos. ¡Que nooooo! Ya os lo habíais creído ¿eeehhh? Por supuesto todos estupendísimos, y alguno (estoy convencida) con estudio previo de compatibilidad.

Se van sucediendo los días, y los concursantes, por un lado tienen que “resistirse” a los tentadores y tentadoras, y por otro confiar en su pareja, de la que les ponen vídeos sobre sus andanzas en la otra casa.

Tienen citas con los solteros y solteras, y todo muy normal.

Tienen también “hogueras”, o lo que viene siendo ven p’acá, que te voy a poner unas imágenes de tu pareja que lo vas a flipar. Y las “hogueras de confrontación” en las que la pareja que toque se reúne y habla de sus cosicas, de cómo va la experiencia y tal y tal. Todo súper real.

En resumen, es un sitio donde van parejas en un mal momento, para tener excusa para acostarse con quien les apetezca, y luego hacerse famosos de los de ir a GH, Mujombres o Supervivientes.

Enseñanzas:

  • El diálogo está sobrevalorado, si estás en crisis con tu pareja, no hables, vete a una isla llena de tíos o tías buenas y pásate por la piedra todo lo que puedas.
  • Hay que ser heterosexual.
  • Si eres leal a tu pareja y te preocupas por ella eres “demasiado bueno”.
  • La pareja ideal es la que te provoca celos o “te da caña”.
  • Ser una persona celosa es símbolo de amor.
  • Hay que estar bueno o buena y con buena delantera.

Así que nada, con este panorama, sólo nos falta un reality más que limite los tipos de pareja y lance mensajes de este tipo a nuestros adolescentes y jóvenes. Todo muy bien para la construcción de su personalidad y la creación de prejuicios, complejos y vivencias reguleras.

Si quieres triunfar y eres hombre, machácate en el gimnasio, y adopta la pose de chico malote. Conquista a todas las mujeres que estén buenas que tengas en tu entorno y parte del exterior. Ya estás listo para ir a un programa y liarla.

Si quieres triunfar y eres mujer, ponte más talla de pecho, ponte extensiones, adelgaza y hazte la débil y desvalida. Déjate conquistar, pero con elegancia, haciéndote la durilla. Al vestirte tápate lo justo, pero que se vea cacha. Ya estás lista para ir a un programa y liarla.

Estudiar está sobrevalorado, y labrarse un futuro de forma honrada más.

¡Gracias televisión!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.