Me da igual la edad que tengas. ¿Cuántas veces a lo largo de tu vida has oído esta expresión? ¿Cuándo fue la primera vez que la oíste? ¿Eras del grupo de “chavales”?
Es la típica frase que va pasando de generación en generación, y que avieja directamente a los que lo dicen por primera vez; a partir de decirlo un día, echando unas cañas con los amigos, ya pasas a formar parte de los viejunos.
Una tendencia muy importante y poco real es la de generalizar, desde el principio de los tiempos.
En los 70: es que los jóvenes de hoy en día solo piensan en meterse en líos de política y hacer manifestaciones (ilegales en aquel tiempo).
En los 80: es que los jóvenes de hoy en día solo piensan en drogarse y hacer el mal.
En los 90: es que los jóvenes de hoy en día solo piensan en la música “chunda-chunda” y tomarse pastillas de esas para drogarse.
En los 2000: es que los jóvenes de hoy en día solo piensan en salir, hacer juergas y no en labrarse un futuro.
En los 10 (¿se dice así?): es que los jóvenes de hoy en día solo piensan en el móvil, los videojuegos y, por supuesto, en drogarse.
En los 20: es que los jóvenes de hoy en día (añada usté, sí, usté lo que crea que hacen).
PUES HE DE DECIR QUE NO. Así, alto y claro.
¿Que los hay “desgarramantas”, como dice mi sabia madre? Por supuesto; siempre los ha habido, y siempre los habrá. Pero lo que no podemos hacer es criminalizar a todos, ni tildarlos de vagos y maleantes, como en otros tiempos, por lo que haga un número limitado de la chavalada; porque sí, es un número limitado.
Lo que a veces no somos conscientes, es de que “los jóvenes de hoy en día” son reflejo, en muchas ocasiones de los que han visto, vivido y sentido en casa; y en muchas otras ocasiones de lo que no han visto, no han vivido y no han sentido en casa, por la ausencia justificada o no de los padres, madres o tutores. Cada vez que se dice aquello de “los jóvenes de hoy en día” convendría contar hasta 10 mientras pensamos en qué les hemos aportado.
Con esto no quiero quitar responsabilidad a chavales de 18-20 años para arriba, ya adultos con pelo en los… tal, que tienen un comportamiento o realizan acciones delictivas; con esa edad ya sabes lo que está bien y lo que no, y si no ya es hora de aprenderlo. Para eso son menores los jóvenes (a veces todavía niños) de 12 años en adelante, para que desde casa se les enseñe, dentro de su nuevo “estatus” de joven adolescente.
De todas formas, siempre llama más la atención hablar de los jóvenes conflictivos y del botellón que de otras cosas positivas y constructivas que hacen.
Los gaztetxes, entendidos como lo que son “casas de jóvenes”, en los que se organizan de manera autogestionada actividades de su interés, desde y para ellos y ellas. Aquí sí que entra la polémica de la okupación, que daría para mucho, pero en su esencia, los gaztetxes y las gazte asanbladas son movimientos juveniles, culturales y sociales muy importantes por lo menos por estos lares.
La organización de “brigadas de limpieza”, que han surgido en distintas ciudades tras botellones y jaleos varios, organizadas a través de redes sociales.
El movimiento scout, por lo menos en sus bases, gestionado y llevado por jóvenes, para jóvenes. Es un movimiento educativo en el tiempo libre, que fomenta valores y experiencias que de otra manera es más difícil vivir.
Organización en centros escolares de clases de apoyo de alumnos mayores a otros más pequeños que de otra manera no se lo podrían permitir.
Y un sinfín de iniciativas y cosas chulas que van saliendo de vez en cuando por las noticias o las redes.
Yo tengo muy claro que cuando se confía en ellos, y no estamos continuamente cuestionándoles lo que hacen, lo que deciden y lo que dicen, son capaces de llevar a cabo proyectos increíbles y originales.
Y para muestra un botón:
Musical creado por el alumnado de la ESO de Jaso Ikastola, mediante un proyecto (STEAM) que combina las ciencias, la tecnología, la ingenieria, las artes y las matemáticas para crear algo, que en esta ocasión es un musical original (creado desde cero por los chavales). Impresionante.
Confiemos un poco más en las generaciones que vienen, que al final solo están tratando de tirar para adelante con la mierda de mundo que les vamos dejando las generaciones anteriores.