#preguntareal
Y es que desde bien pequeñas hemos intentado provocarles curiosidad e inquietudes por saber, conocer, ver y vivir.
Aunque claro, tienen que ser conscientes de lo que ven, de poco sirve llevarles con 1 año… De lo que se trata es de que se acuerden, y luego lo relacionen con cosas que estudien, o vean, o hablen. Y disfrutar del arte y de la cultura.
Voy a hacer un repaso por los museos que hemos visto en distintas vacaciones o excursiones que hemos ido haciendo con ellas.
El primer museo al que les llevamos fue el de Altamira. Tenían como casi 6 y casi 4 años (3º y 1º de Educación Infantil). La verdad que estuvo muy muy chulo. Tenían una parte dedicada a los txikis, en la que pintaban su propia pintura rupestre, y en el resto del museo todo era muy manipulativo, por lo que podían andar a sus anchas y toquitear todo. Además, les flipaban los prehistóricos, así que genial (http://www.culturaydeporte.gob.es/mnaltamira/home.html).
En ese mismo viaje fuimos a ver el Palacio de la Magdalena (https://palaciomagdalena.com/es/). La visita guiada fue un peñazo para nuestras pobres hijas (y para nosotros, la verdad), pero la aguantaron estoicamente. No dieron nada de guerra (que el resto del grupo, antes de empezar nos miraba con mala cara, por las chiquillas), mientras se imaginaban siendo la Princesa Sofía (¡la de dibujos, no la de Borbón!), o Anna y Elsa en Arendelle.
En Soria, visitamos con ellas las ruinas de Numancia, y también se mostraron muy interesadas. Coincidió que alguna de las dos estaba viendo en la ikastola todo el tema del Imperio Romano y, ver en vivo cosas que habían estudiado les llamó mucho la atención (https://numanciasoria.es/) . De ahí fuimos al Museo Numantino, donde están gran parte de los materiales, herramientas, monedas… que encontraron en el yacimiento; aquí fuimos por libre, pero está bastante bien explicado (https://museoscastillayleon.jcyl.es/web/es/museosoria/museo-soria.html).
Sin salir de Castilla y León, fuimos en otra ocasión a Burgos. Allí vimos el pedazo de museo que tiene dedicado, entre otras cosas, a Atapuerca: El Museo de la Evolución Humana. Nos encantó, la verdad. Se sigue un recorrido que viene marcado, y explica muy bien todo. Muy manipulativo, muy interactivo y muy interesante para las txikis. Lo vimos en una mañana, y por la tarde ¡querían volver! Se puede hacer visitando previamente el yacimiento de Atapuerca (está organizado con autobús), pero nosotros no lo hicimos, porque estaba lloviendo a mares, y el yacimiento tiene bastante parte de exterior, e ir con las txikis, que se empapen… pues como que no. Es una visita super recomendable (https://www.atapuerca.org/).
También estuvimos en la catedral, vimos el Papamoscas… también les resultó curioso. Al final la grandiosidad de esos edificios, yo creo que llaman la atención a grandes y pequeños (http://catedraldeburgos.es/).
En Asturias , aprovechando que no paraba de llover un verano (somos de tener suerte, sí), estuvimos viendo algún museo también. En esa zona hay bastantes yacimientos arqueológicos con restos de dinosaurios, y como era un tema que les interesaba, allí que fuimos. El museo que vimos no era especialmente grande, pero estaba bastante apañado para niños, daba bastante información (http://www.museojurasicoasturias.com/).
A Donosti también hemos ido en más de una ocasión. Por un lado, como a estas chicas les gustan bastante las ciencias, fuimos a Eureka! Museoa, un museo de ciencia, ubicado en Miramón. Hemos ido de manera particular, pero también organizamos una visita con la clase de Hija2, y fuimos en grupo (un autobús entero entre niños y mayores). Muy buena experiencia en los dos casos.
Cuando fuimos de manera individual, estuvimos un poco a nuestro aire, y también acudimos a uno de los talleres, en el que realizamos un mapa de estrellas; lo pasamos muy bien, y les resultó muy interesante. Había un montón de experimentos explicados, que se podían hacer de manera muy sencilla, sobre todo de física (electricidad, ondas, fuerza…). Les gustó mucho, y todavía, a día de hoy, quieren repetir.
Cuando fuimos en grupo, tenían los txikis una monitora que les fue explicando distintos experimentos que iban haciendo, de una manera muy lúdica. Esa visita la podías encargar en euskera o en castellano.
Hay una zona techada en la que puedes comer, llevándote tus cosas de casa, o un pequeño restaurante a precios más o menos cabales.
También hay un pequeño planetario, con sala de cine circular, en la cual tienen de manera temporal distintos cortos de divulgación científica para los txikis.
Muy recomendable (https://www.eurekamuseoa.eus/es/).
También en Donosti, está el Aquarium Donostia. Tienen distintas especies marinas y un pequeño museo sobre la historia de los balleneros, las traineras y alguna cosilla más. Es chulo para ver, pero en mi opinión, caro para lo que ves. Aunque bueno, haces la tarde… entre ver el Aquarium y dar una vuelta por la parte vieja… (https://aquariumss.com/inicio).
Otra vez estuvimos en Madrid; allí sí que había mucho para ver, así que en distintos viajes (por no saturarles tampoco), hemos ido viendo algunos museos.
Primero vimos el Museo Nacional de Ciencias Naturales. Les gustó mucho, ya que había bastante variedad de animales, bien explicados, algunos curiosos… Estuvo bien. Además coincidió que había una exposición sobre mujeres que habían obtenido el Premio Nobel en distintas disciplinas, y fue muy interesante (https://www.mncn.csic.es/es).
Al ir con niñas, toooodo el mundo te recomienda el Museo de Cera. Bien, pero sin más. Es curioso por reconocer personajes actuales y así, pero, entre que algunos no se reconocían, y la mayoría resultaban desconocidos para las txikis, por antiguos… pues eso, sin más. En la misma visita tienes la opción de ver el túnel del terror (como la casa del terror de las barracas), un simulador 3D (bastante viejuno), y la joya de la corona: un documental sobre la historia de España que… ¡telita marinera! Desfasado, y bajo nuestro punto de vista, la historia contada un poco… así, como escorada a la derecha… (www.museoceramadrid.com).
Y luego estuvimos en el Museo del Prado. Tengo la suerte de tener buenos amigos, algunos repartidos por el mundo, y un gran amigo, que tengo viviendo en la capital, nos hizo un pequeño recorrido guiado, apto para niñas, ya que si te metes a ver todo el museo puedes acabar locatis. Les explicó, en profundidad, pero con un lenguaje que entendían 6 ó 7 obras; además en exclusiva para ellas…Fue super-chulo, y super-didáctico… las txikis se acuerdan un montón y les encantó la historia detrás de cada obra. (¡¡Gracias guapo!!!). Importante, para evitar colas, coger las entradas previamente, aunque ahora con todo el tema del Covid, no sé como estará el tema (https://www.museodelprado.es/).
También les llevamos a ver el Gernika en el Museo Reina Sofía (esta sí, de Borbón). Había sido el 80 aniversario del bombardeo de Gernika, y habían trabajado el tema en la ikastola, haciendo su versión del cuadro de Picasso y otras actividades. Aprovechamos que a partir de una hora se podía entrar gratuitamente al museo, y fuimos a ver exclusivamente el cuadro. Se quedaron muy impresionadas (https://www.museoreinasofia.es/).
Y, aunque no somos precisamente monárquicos, fuimos a ver el Palacio Real. Es interesante de ver, el salón del trono, las escaleras…; además luego puedes ver la Real Armería, con un montón de armas y armaduras de cuando se luchaba a caballo, que les llamó la atención, sobre todo las que había de infantes, que eran más o menos de su tamaño (https://www.patrimonionacional.es/visita/palacio-real-de-madrid).
En Navarra, estuvimos en Zugarramurdi, una gran cueva donde en otros tiempos (y quizá en nuestros tiempos), se reunían las soginak, y hacían los akelarres. Se accede con entrada, y se puede ver la grandiosidad de la cueva principal, y dar una vuelta por los alrededores para ver el entorno, que es espectacular. En el pueblo hay un museo dedicado a la brujería y al proceso de la inquisición, mediante el que acusaron a 53 personas del pueblo de brujería, llegando a morir 11 en la hoguera (más 6 de camino a Logroño). Es pequeñico pero apañado, explica muy bien todo el tema y merece mucho la pena verlo (https://www.reservaonline.support/turismozugarramurdi/index.html).
Otra visita chula es el castillo de Olite. Ya, si vas en la semana medieval, es increíble, pero nosotros nos lo montamos por nuestra cuenta. Fuimos en tren, fue su primer viaje en tren. En septiembre los horarios estaban bien para no tener demasiado tiempo sin hacer nada, así que allí fuimos. Se puede coger visita guiada, que hay también teatralizadas, o ir a tu bola. Nosotros, a nuestra bola, ya que las txikis eran pequeñas (3 y 5), y no sabíamos cómo lo iban a llevar. Es la típica excursión desde colegios e ikastolas, así que más adelante también lo vieron con sus compis de clase (http://guiartenavarra.com/PALACIO/).
Y otro de los sitios obligados de Navarra, es el Castillo de Javier. Aquí también fuimos a nuestro aire; es interesante, además de por el castillo, por los viajes de San Francisco Javier por distintas partes del mundo. Está inevitablemente unido a la comunidad Jesuita que gestiona un centro de retiro espiritual y un albergue juvenil justo al lado del castillo. También hay una comunidad de religiosas, Las Misioneras de Cristo Jesús, que tienen una exposición sobre misiones en todo el mundo; curioso de ver (https://www.santuariojaviersj.org/). Es otra de las visitas escolares por excelencia.
Y luego, en Pamplona, intentamos llevarles a exposiciones que traen (no tan a menudo como nos gustaría), pero un poco de todo: trenes, cliks de playmobil, belenes, fotografías antiguas…
Así que eso, con 10 y 12 años que tienen, la verdad es que han visto bastantes más museos y exposiciones que algunos adultos… Intentamos hacer las visitas para que ellas las disfruten, y casi se queden con ganas de más, de manera que es un plan que les encanta; y es otra forma de disfrutar del ocio en familia…
¡A ver cuál es el siguiente!